domingo, 20 de junio de 2010

Punto y aparte

Intentaré ser breve, porque hoy no estoy inspirado.

Acabo de terminar mi particular vía crucis, ese que empezó con una condena a muerte a base de antibióticos con fuertes efectos secundarios, y terminó con una lanzada por parte de una miembro de la Legión de las Termófilas. De mi época de exámenes. No obstante, es una cruz que abrazo con mucho gusto: mi carrera me está dando grandes momentos, conocimientos estupendos que a todo el mundo sorprenden, no solo por las curiosidades que cuento, sino también por lo útil que resulta a muchos mis consejos sobre salud. Y es que, aparte de cosas serias que suponen una base para el futuro profesional, Farmacia me da curiosidades de esas que te arrancan una sonrisa y te sirven para arrancarlas: ¿sabíais que las pociones existen? Son preparados a base de jarabes simples (disolución de azúcar en agua con más del 64% de la primera) que llevan principios activos obtenidos del plantas, como infusiones. ¿y sabíais que el colesterol bueno es el mismo que el colesterol malo (colesterol, a fin de cuentas) y que lo único que los diferencia es la naturaleza de una cosita que llevan de la mano? El colesterol es una molécula que es siempre la misma, pero puede llevar un ácido graso unido - esterificado - a su grupo hidroxilo. Si ese ácido es saturado (sin dobles enlaces) el colesterol (malo) se empaqueta y puede cristalizar, formando los dichosos ateromas que, de aparecer en uno de los vasos del corazón, pueden llevarte al infarto. Si es uno de esos famosos ácidos grasos insaturados (con dobles enlaces), su estructura hace que hagan codos que impiden la cristalización (colesterol bueno). También aprendí - no pregunten como - que el ojo como estructura ha aparecido a partir de seis contingencias evolutivas diferentes (a partir de seis puntos de origen diferentes en la evolución). Otra cosa de esas que te dejan helado es conocer que el vampirismo existe. La enfermedad de Gunter pudo dar lugar al mito de los vampiros en la edad media. Está basada en la alteración de la síntesis de una enzima que participa en la construcción de las porfirinas, elementos que están en el grupo hemo de la sangre, gracias al cual el oxígeno llega donde tiene que llegar. Al alterarse una enzima, el material con el que trabaja - uroporfirinógeno I - se acumula en el stock y acaba por oxidarse gracias a nuestros enemigos los radicales libres, dando lugar a compuestos de color rojo que se acumulan en la piel y en la orina. El resultado: problemas de fotosensibilización que mantienen alejado al afectado de la luz solar, daño del material dental que produce fluorescencia de los piños en la oscuridad, anemia y palidez. Lo de volar y tomar forma de murciélago cuando viene en gana... es otra historia.

Académicamente, ha sido mi mejor curso en años, contando mi era como estudiante de instituto (horrible y hormonado lugar...). Sin embargo, by far, ha sido también el mejor año en lo social. Especialmente, porque he podido darme cuenta de la gran biodiversidad de la que gozamos en lugares más o menos grandes, como Salamanca. O lo que es lo mismo: que siempre hay alguien con quien puedes llevarte bien, un roto para un descosido. Los que me conocen saben que no soy un tipo normal, no me gusta hacer algunas cosas que, otros, hacen como borreguitos (exempli gratia, darle a la botella a toute heure, sin ver otra alternativa social que darle a la botella a toute heure, de tal manera que si no le das a la botella a toute heure, eres un amargado). Saben que me gustan cosas raras, como ir al cine, salir a hacer deporte, echar una visitilla al centro comercial, de bares con la única y santa finalidad de conversar (hablar sobre cosas inteligibles y con sustancia, y no sobre cosas sueltas y absurdas). O bien hacer cosas exóticas, tales como visitar restaurantes de comida foránea o... ir al karaoke (me lo descubrieron ayer, y de antemano, pido disculpas públicas al representante de Eurovisión de este año por destrozar su canción a base de gallos nada pequeñitos). Soy un bicho, un monstruo, sí. Pero hay más monstruos. Y, aunque algunos monstruitos se van de mi lado (Tabea, Marta, creedme que os echaré de menos) por los designios de la vida, me queda el consuelo de saber que existen. Y es que con esas, la posibilidad de encontrar más monstruos tiene base empírica. Espero poder localizarlos este año o cuando comience de verdad mi vida (al término de la universidad, cuando sea el dueño definitivo de mi propio destino). También he aprendido que no debes fiarte de nadie, que muchos te pondrán buena cara... por fuera, pero no por dentro. Y otra lección importante: si una cosa no está bien, córtala por lo sano y a buscar nuevos horizontes. Si te tocan las gónadas constantemente, te tratan mal o, sencillamente, no existe compatibilidad con ciertas personas, cambia. No pierdas el tiempo con gente que no te conviene, evita irte a casa pensando ¿qué he hecho mal? cuando alguien te grita sin motivo aparente solo porque tiene un mal día. Esto va a dar lugar en mi vida a una serie de profundas reflexiones que pueden tener profundas consecuencias. Consecuencias que nadie va a entender salvo yo. Y por las que pido perdón, ya que no todos los que se verían afectados por mis decisiones tienen la culpa de que esté planteando tomarlas. En cualquier caso, intentaré oponerme a la adversidad como siempre he hecho, ahogando las penas en disolventes-no-alcohólicos y con mis propias manos, de tal manera que siempre haya una sonrisa mía para mis compañeros de viaje, aunque no tenga ganas por dentro.

En definitiva, mucho bueno y mucho malo. Pero nada de lo malo que me ha pasado no tiene una parte buena. Con lo cual, mucho-mucho bueno. Gracias a todos los que lo han hecho posible, desde mis compañeros de piso (mención especial a Tabea este año y So Yeun y Noemí el pasado) hasta las decenas de compañeros de clase con los que he tratado este año. Y por supuesto, a mis cine-amig@s (mención especial a Kate-Lennon y Mammen-Moon, a las que voy a echar de menos el año siguiente, como ya dije).

A todos, un abrazo. A cuarto de Farmacia, con ganas y mano de hierro.

(hoy tocaba escribir cosas personales... para eso están los blogs, ¿no? Próximamente, volveré a comentar cosas... a ver si se me ocurre algo, se admiten sugerencias)

4 comentarios:

Kate Lennon dijo...

Gran entrada, amigo mío. Buenas curiosidades (aunque no he entendido la mitad, mis conocimientos de bioquímica y demás están un tanto oxidados, ya que no los toco desde 2º de Bachiller), y me has hecho reír mucho con las menciones a la performance del viernes y las mezclas de idiomas.

Aquí un monstruito orgulloso de serlo. Por supuesto que existimos! Lástima que no seamos muchos. Y sobre lo de separarnos... bueno, nunca se sabe cuándo podríamos volvernos a ver :)

Un abrazo!

Unknown dijo...

Siempre que consideres que un master no es prolongar la agonía...

XD Feliz verano por ibiza Kate!

Jesús dijo...

Dani he cotilleado un poco, y he leído esta entrada, y a parte de aprender cosas teóricas, me han encantado las demás reflexiones (la mayoría las comparto) y debía plasmar aquí mi firma aunque yo no tenga blog...
Un abrazo!

Unknown dijo...

nunca es tarde para hacerse uno Jesús, mira Kate!

Otro para ti!! Nos vemos por facebook!